El campeón no pregona la paz y la amistad en El Pireo y es más líder (71-77)
El Real Madrid volvía a visitar una de las canchas más calientes de Europa. Después de una prórroga en Estambul ante el Fenerbahçe en la que se perdía la imbatibilidad, que no el liderato en Euroliga, tocaba viajar a El Pireo. El resultado en esta ocasión fue positivo y los de Chus Mateo volvieron a su normalidad, a la victoria.
En un Pabellón de la Paz y la Amistad enfervorecido esperaba el Olympiacos. Los griegos tenían ganas de revancha después de perder la final de la pasada Euroliga en Kaunas ante los blancos. Pero pese a los 17 puntos de Thomas Wallkup y los 10 de Moustapha Fall, el Real Madrid estuvo mejor en los momentos decisivos de partido.
Parcial de 2-8 en el último cuarto
Especialmente, en el último cuarto con el parcial de 0-6 (que se convirtió en 2-8) para la escuadra española liderada por Campazzo y Tavares.
En el tercer cuarto la intimidación de Vincent Poirier en la pintura con dos tapones y cinco rebotes en el cómputo global del partido -aunque no anotó-, acabó aportando su granito de arena.
Dzanan Musa tuvo una actuación destacada con 23 puntos y cinco de siete en triples. Los 18 de Hezonja y los 11 de Tavares, especialmente en la segunda parte fueron fundamentales.