Centro de estadísticas del Real Madrid-Barcelona
La primera canasta de la temporada la anotó Satoransky. Preámbulo de un mejor inicio azulgrana, que llegó a dominar 4-10 por los múltiples errores en el lanzamiento exterior de los blancos. Una tónica durante todo el choque (10/34 en T3, 29 %).
Mostró entonces su tarjeta de presentación el 'desconocido' Rathan-Mayes y comenzó la remontada para cerrar el primer cuarto con ventaja (20-18). Lo que el Madrid fallaba desde lejos, el Barça, en el que debutaron Punter, Anderson, Metu y el exmadridista Juan Núñez, lo hacía bajo el aro. Se notaba en ambos que era el primer encuentro oficial del curso.
El acierto mejoró algo en el segundo cuarto. Fue Ibaka, en su regreso oficial, quien anotó los primeros puntos desde la línea de personal. Y Abalde tomó el testigo para abrir hueco (32-24, min 14). Peñarroya no tuvo más remedio que parar el partido y devolver a la cancha a Satoransky y a Parker. Con ellos se firmó un 0-8 que igualó el electrónico. Pero fue realmente Brizuela el microondas que calentó el choque y devolvió a la ventaja a los catalanes con su tercer triple sin fallo que puso el 41-42 con el que se llegó al descanso.
Despertar de Hezonja y Tavares
En el regreso al parqué, el croata y el caboverdiano se pusieron las pilas para liderar, con 9 y 7 puntos respectivamente, un nuevo acelerón del Madrid, que disfrutó de la máxima renta del choque (60-48, min. 26). El Barça había perdido el dominio en el rebote, pero pudo contar en ese delicado instante con un 2+1 Jabari Parker y un triple de Abrines para detener la sangría. Y aunque el actual campeón volvió a abrir hueco de 10, al final del cuarto se llegó con 67-61 tras dos malas acciones de Tavares.
Eso dio vida extra al Barça justo en el momento en el que se les cerró a sus rivales el aro (0/7 en triples). Y a pesar de la buena defensa de Ibaka, la dirección conjunta de Laprovittola y Núñez les permitió meterse de nuevo en el choque con todas las garantías. El partido entró en el último minuto igualado a 80. Y ahí el Madrid fue mejor, con un Campazzo que volvió a dirigir de modo excelso a sus compañeros para sellar el triunfo y el pase a la final por 89-83.
Los mejores
Campazzo, con 18 puntos, 6 asistencias y 33 de valoración, fue el líder del Real Madrid. En el Barcelona, el más destacado fue Jabari Parker, con 17 puntos, 5 rebotes y 17 de valoración.