Y tras el subidón de adrenalina que se dio durante la tarde de sábado no dudó en pedir, ya bajado de su monoplaza, un Gran Premio para Madrid. "Se merece tener uno de Fórmula 1". 

No es extraño para alguien como Checo Pérez, que ha pasado largas temporadas en la ciudad y al que le encantan los circuitos urbanos, justo lo que sería esa nueva carrera que cada vez suena más en el calendario de la FIA. 

Después de hacer las delicias de los aficionados con donuts, derrapes y aceleraciones máximas, Pérez ya pensó más en lo que le espera antes del parón por vacaciones. Necesita hacer buenas carreras. O mejor dicho, buenas calificaciones, su cruz este año. 

"Mi prioridad es cerrar dos buenos resultados. Espero estar en el podio en Hungría, aunque aún queda temporada por delante", dijo antes de comentar que su objetivo a final de año ya no es el Mundial. "Lucharé por ser subcampeón del mundo. No estoy segundo ahora por milagro sino por haber ganado carreras". 

Alonso y Sainz

En esa lucha por la segunda plaza tras el inalcanzable Max Verstappen se encuentra Fernando Alonso, aunque venido a menos por la bajada de prestaciones del Aston Martin, a 19 puntos. El mexicano considera que los españoles tienen que disfrutar tanto del asturiano como de Carlos Sainz. 

"No hay que compararlos porque son dos pilotazos. Nunca sabes cuándo terminará esta etapa dorada del automovilismo español", ha expresado.