Mucha expectación había en torno a esta primera sesión de entrenamientos con las actualizaciones que Red Bull y, sobre todo, Ferrari y Aston Martin, han presentado para este Gran Premio de Emilia Romagna. Los tiempos, por ello, y más con el fuerte viento que soplaba, no deberían ser muy significativos aún en un fin de semana sin carrera esprint en el que habrá más sesiones de prueba. 

De ahí que salieran todos con diferentes compuestos y cargas de gasolina, con configuraciones aún no definitivas en el coche. Aun así, hubo algunos sustos en la pista, como el que protagonizó Albon con su Williams, que se quedó parado y provocó poco antes del ecuador una bandera roja. También hubo quejas de muchos pilotos por el rebote y las vibraciones que notaban en sus monoplazas. 

Muchos se fueron de excursión por las escapatorias. Verstappen sufrió con la estabilidad, o la falta de ella. Hamilton estuvo a punto de liarla con un trompo que pudo salvar evitando golpear el muro.

Quienes mejores sensaciones mostraron, cuando ya algunos calzaron las gomas blandas nuevas, fueron los Ferrari, con Russell y su Mercedes colado entre ellos. Leclerc fue el más rápido de todos con 1:16.990, con Sainz a 0.130 décimas. 

Alonso, por su parte, ofreció perspectivas positivas con las ruedas medias, pero cuando sacó las blandas cometió un error en pista y se quedó sin ese tiempo. Habrá que esperar a los Libres 2 para ver dónde está Aston Martin con su último paquete de mejoras. De momento, 10º, a nueve décimas del monegasco.