Sin novedad en el frente británico. Max Verstappen, quien a los 25 años toma una figura tiránica en la Fórmula 1, se ha quedado con una pole ajustada, seguido por Norris y Piastri. 

Podría ser apretada. Podría ser un poco injusta, por el buen papnel de Norris y de Piastri. Es, en todo contexto, una nueva victoria más para el neerlandés, para el vigente campeón de la competición, para el hombre que busca romper todos los récords de la F1 y que, de momento, no tiene un rival que logre frenarlo. 

"He estado cerca de Verstappen, mi último vuelta ha sido muy buena, estaba escuchando a Zak Brown según entraba en línea de meta... Estoy muy contento, ha sido un día muy especial para nosotros", dijo Norris al cierre de la prueba. 

La gran noticia de la jornada sabatina está de la mano del equipo Woking. El conjunto consiguió la mejor clasificación de la temporada aunque su nivel sigue muy lejos de la envidiable forma de Red Bull. 

"Ha sido una clasificación alocada, han pasado muchas cosas y había lugares donde deslizaba mucho. Les ha costado un poco, pero me encanta ver ahí a los McLaren. En la Q1 y la Q2 había sitios donde estaba mojado, pero sabiendo el coche que tenemos no hacía falta ir a tope", dijo Verstappen.

Sainz, quinto; Alonso, noveno

Para los españoles no ha sido un día favorable. Carlos Sainz, que había ilusionado a los seguidores de Ferrari en las prácticas de la mañana, no mantuvo el ritmo ante un Verstappen que es un piloto sin rival visible. El esfuerzo de Sainz, sin embargo, le otorgó un premio que, en este punto, sabe a poco: la quinta posición. 

Fernando Alonso, por su parte, se ha visto afectado por la lluvia. En sí, la vuelta del asturiano no ha sido buena: no ha mejorado con los neumáticos blandos y se ha visto incómodo ante las condiciones climáticas. El bicampeón terminó en la novena plaza e intentará luchar por el podio en la jornada del domingo.