Jorge Martín llega al circuito de Motegi con una ligera ventaja en la general del Mundial de MotoGP. El piloto madrileño de Ducati-Pramac cuenta con 21 puntos de ventaja sobre el italiano de la escudería matriz Ducati después de su auténtica exhibición en el GP de Indonesia, donde relegó a Francesco Bagnaia a la tercera posición a más de cinco segundos. Pero también demostró sus puntos débiles al irse al suelo en la carrera esprint cuando era líder.
"Puede que quizás fuera más rápido la pasada temporada, pero en esta soy más completo", aseguró el madrileño este jueves. El año pasado completó el doblete esprint/Gran Premio en el trazado de Motegi.
Con el de Japón, quedan por delante cinco Grandes Premios por disputarse y un total de 185 puntos como máximo antes del desenlace del Mundial. Así pues, la desventaja de Bagnaia está lejos de ser definitiva, aunque 'Pecco' también sabe lo que es sufrir caídas en el momento más inoportuno.
Márquez y Bastianini, al acecho
"Los dos hemos cometido errores, pero Jorge ha sido más regular que yo", reconoció Bagnaia el jueves.
Por detrás de ellos, Enea Bastianini, el otro piloto oficial de Ducati, y Marc Márquez, con una moto de la misma marca pero de la escudería cliente Gresini, cuentan respectivamente con 75 y 78 unidades de desventaja y deberán apurar sus opciones de pelear por el título.
Márquez, siete veces campeón del mundo de MotoGP entre 2013 y 2019, logró la victoria en dos Grandes Premios desde comienzos de septiembre y quiere seguir demostrando que está de regreso entre los mejores antes de unirse el año que viene a Ducati, donde sustituirá a Bastianini.
El italiano, por su parte, irá al equipo francés Tech3.
Las condiciones climáticas sobre el circuito nipón situado a 150 kilómetros de Tokio podrían tener su influencia en la carrera en una época del año en que las lluvias son habituales.
Sequía de los japoneses
Una cosa es casi segura, las máquinas japonesas no pelearán entre ellas por la victoria. Yamaha y Honda se están viendo completamente dominadas por las europeas, comenzando por Ducati, pero también Aprilia y KTM.
Si su palmarés se queda virgen este curso, será la primera vez desde 1970 en que una marca japonesa no logra una victoria en una temporada en la categoría reina.
Para los dos pilotos franceses en MotoGP, Fabio Quartararo (Yamaha) y Johann Zarco (Honda-LCR), el podio sigue siendo un objetivo lejano.
Honda y Yamaha deberán esperar muy probablemente a la entrada en vigor de un nuevo reglamento en 2027 para brillar de nuevo.
La firma del diapasón introducirá un nuevo motor en 2025, pero el problema actual común de las dos marcas japonesas es una falta de adherencia por no tener una aerodinámica adecuada.
Sin embargo, el público de Motegi podría celebrar una victoria del piloto japonés Ai Ogura en Moto2, líder actual del Mundial de la categoría intermedia.