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España y Alemania vuelven al Mundial de 1994: otro 1-1 en una fase de grupos

Daniel Núñez
España y Alemania firmaron un empate
España y Alemania firmaron un empateINA FASSBENDER / AFP
Ambas selecciones emularon el partido de hace casi 30 años, con un reparto de puntos que deja en mejor posición al combinado dirigido por Luis Enrique porque afronta la última jornada como líder.

España y Alemania, como ya ocurriera en el Mundial de 1994, se enfrentaron este domingo con motivo de la segunda jornada de la fase de grupos. Por aquel entonces, los de Javier Clemente afrontaban dicho encuentro después de empatar frente a Corea del Sur (2-2) en el estreno, un resultado algo insuficiente, sobre todo si lo comparamos con el reciente 7-0 frente a Costa Rica.

Esta vez, sin embargo, el equipo germano llegaba en una situación límite tras la sorprendente derrota ante Japón (1-2), todo lo contrario a la cita de mediados de los años 90, ya que vencieron por la mínima a Bolivia en el estreno. Aquel partido europeo se saldó también con empate a uno; Andoni Goikoetxea (minuto 14) abrió el marcador y Jürgen Klinsmann estableció el 1-1 definitivo poco después de que comenzara la segunda mitad del duelo (48').

Ambas selecciones consiguieron clasificarse a los octavos de final: el combinado liderado por Matthäus lo hizo en primera posición con siete puntos y España pasó como segunda (cinco), algo que, salvo sorpresa mayúscula, no ocurrirá en esta edición. Alemania se despidió del Mundial de 1994 en los cuartos de final (derrota por 2-1 contra Bulgaria), una ronda después de hacerlo su compañera de grupo (frente a Italia por ese mismo resultado). Esta última perdió la final ante Brasil, que conquistó entonces su cuarto título, el penúltimo hasta la fecha -también en 2002-.

Las 'semis' de 2010, anterior precedente

Entre aquel partido del siglo pasado y el de este domingo, ambas selecciones se han visto las caras en una única ocasión en un campeonato del mundo. La Roja se llevó la victoria en las semifinales de la edición de 2010 gracias al gol de Carles Puyol mediante un fantástico testarazo tras un saque de esquina. El 0-1 en el marcador, suficiente para conseguir el pase a la final y, a la postre, levantar el primer trofeo de su historia.