Inglaterra tampoco carbura ante los eslovenos, pero acaba primera (0-0)
CENTRO DE DATOS DEL INGLATERRA-ESLOVENIA
Si los ingleses querían, además de ganar, disipar las dudas generadas en sus dos primeros partidos, no lo consiguió ante Eslovenia. Tuvo el balón, pero se empeñó al principio en perderlo. Jugando con fuego. Y luego, cuando se dejaron de tonterías, tocaron y tocaron incapaces de encontrar un hueco en la bien colocada zaga rival en toda la primera parte.
Sólo en los instantes en los que Foden y Saka conectaban, los Three Lions generaban algo de fútbol. La primera vez que se asociaron, acabó el balón en las mallas, pero el del City asistió en fuera de juego al del Arsenal. Bellingham estaba demasiado lejos de la acción, casi como carrilero izquierdo. Sic.
Esa acción del gol anulado, y un cambio de dibujo, con un 4-4-2, sirvió para que los eslovenos le vieran las orejas al lobo, o a los leones, según se mire. Ya no llegaban a todas las ayudas y por fin pudieron encontrar los de Southgate a Kane, que probó un par de veces, sin suerte, su disparo ante Oblak.
Un problema mayúsculo
El problema, sin embargo, de los ingleses está en el doble pivote desde que comenzó la Eurocopa. Gallagher fue el sustituto de Alexander-Arnold en el once inicial, pero no funcionó y en el descanso se quedó fuera para que apareciera el joven Mainoo.
La cosa mejoró ostensiblemente con su entrada, con Eslovenia encerrada en su área ante la mayor agresividad de su oponente. Parecía más un encuentro de la Premier por el ritmo que, por fin, impusieron los británicos. A los pupilos de Kek sólo les quedaba resistir el asedio lo máximo posible. Si lo conseguían, viendo el otro resultado, estaban en octavos. Un gran éxito para ellos.
Como pasaban los minutos y el gol seguía sin llegar, por fin el seleccionador inglés se acordó de Cole Palmer, aunque quitase de la ecuación a Saka. Muy activo estuvo la gran estrella del Chelsea desde que entró. Él tuvo la mejor ocasión ya en el tiempo añadido, pero Oblak blocó con seguridad.
El silbato final conllevó una explosión de júbilo en Eslovenia, clasificada como una de las mejores terceras.
Jugador Flashscore del partido: Trippier (Inglaterra).