Su estado emocional en esta Eurocopa está siendo como una montaña rusa. Y eso se aprecia especialmente a la finalización de los partidos, donde más de una vez se la escapado una lágrima. A pesar de haber comenzado marcando en el primer duelo ante Croacia, su nivel no está siendo el esperado. Para sus haters, es alimento, no para críticas deportivas sino personales.
Aun así, De la Fuente confía en él. Sus compañeros también. Y Morata explica cómo se siente con todo esto. "Cuando estoy sobre el terreno de juego estoy concentrado y haciendo mi trabajo, pero cuando me sustituyen tengo una emoción similar a la del padre de cualquier jugador que está en el campo".
Es entonces, una vez conseguido el objetivo, cuando da rienda suelta a las lágrimas que le hemos visto en su rostro. Y que quiere volver a sacar, pero de alegría de nuevo. "No hay que avergonzarse de llorar por emociones positivas y ojalá pueda llorar mucho este domingo".
Una Inglaterra de las mejores del mundo
Para sumar el cuarto entorchado europeo para España, habrá que superar a Inglaterra. "Estamos hablando de una de las grandes selecciones del mundo y de la historia, con unas de las grandes ligas del planeta. Sólo tengo palabras buenas para ellos y seguramente en su caso dirán lo mismo", asegura quien compartió minutos en la Premier con varios de sus rivales de este domingo.
Pero mal líder sería si no confiara en los suyos, a los que lleva meses concienciándoles de que tienen todo para llevar a La Roja a lo más alto. "Llevo cuatro o cinco meses en los que les he repetido a los compañeros que íbamos a ganar la Eurocopa, que había que creer en ello, y ahora estamos a un pasito de conseguir algo que significaría mucho para mí".
Argumentos hay de sobra. "Lamine, Fabián, Laporte, Nico, Unai Simón, Cucu, Nacho... puedo mencionarte a toda la plantilla y creo que estamos demostrando que en nuestro país hay grandes jugadores".
Palabra de capitán, palabra de Morata.
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