La llegada de Ilkay Gündogan, un perfil diferente al de Pedri González, amortigua esta pérdida temporal porque es un futbolista que aspira a ser decisivo (ya dio una asistencia contra el Cádiz) en zona de creación y de tres cuartos. Pese a este fichaje de relumbrón, la realidad es que el canario está llamado a tener un papel fundamental y ya fue determinante en la consecución de la última Liga -con seis goles y una asistencia, sus mejores números en la élite-.
El internacional con España, donde también es un fijo, abrió el marcador frente al conjunto de la Tacita de Plata. El encuentro estaba enquistado, Jeremías Ledesma brillaba con luz propia y ya se había superado el minuto 80, por lo que su aparición resultó clave para sumar la primera victoria del curso 2023/24. Más tarde, cuando se acercaba el pitido del árbitro, Ferran Torres, que sustituyó al adolescente Yamine Lamal, hizo el de la sentencia (2-0).
En un entrenamiento de esta semana, pese que ha ganado varios kilos de masa muscular durante el verano para blindarse ante las lesiones (o al menos reducir el riesgo), se vio obligado a retirarse. Las pruebas médicas concluyeron que sufre un problema en el recto anterior del muslo derecho y, sin que el Barcelona lo confirmase en el parte médico, varios medios locales dieron por hecho que no regresará hasta principios de octubre, como podía intuirse tras la información aportada por el club.
Una noticia ya contada
Son varias las veces que se ha informado sobre un contratiempo muscular de Pedri, que llegó a la Ciudad Condal en el verano de 2020. Medio centenar de partidos oficiales acumuló en sus piernas con la camiseta azulgrana en la 2020/21, cifra que aumentó de forma considerable (superior a 70 en el año natural) al incluir las internacionalidades. Cabe recordar que la Roja disputó la Eurocopa, agendada para el año anterior y retrasada por la pandemia de la COVID-19, y el ex de la Unión Deportiva Las Palmas tampoco se perdió los Juegos Olímpicos, con Luis de la Fuente, ahora seleccionador absoluto, al mando.
Si pudo tener tanta presencia, con un registro de récord, fue porque no necesitó parar en ningún momento. Ya en la campaña 2021/22, en cambio, empezaron los problemas. Lo que parecía algo leve se tradujo en una situación bastante grave por una recaída (desde septiembre de 2021 hasta principios de enero en el dique seco). Luego, en abril, tuvo que frenar durante algo más de 30 días por una dolencia en el muslo. En la segunda mitad del 2022, por suerte para él, gozó de plena continuidad.
El presente 2023 no está siendo bueno en ese apartado: vio desde la grada once partidos de su equipo entre febrero y el cuarto mes, aparte de otros cinco más de mayo a junio, la misma cantidad que, como mínimo, a partir de ahora (frente a Osasuna, Betis, Celta, Mallorca y Sevilla). Quedaría en duda para jugar contra el Granada y, por supuesto, no estará disponible para los compromisos ante Georgia y Chipre, con la clasificación para la Eurocopa como objetivo.