El duelo deportivo entre el campeón de LaLiga y el de la Europa League estuvo precedido por una tormenta institucional de grandes dimensiones. Los dirigentes del Sevilla se negaron a ir a la comida protocolaria y al palco de Montjuïc como protesta por la imputación del Barcelona por cohecho en el caso Negreira y el club azulgrana reaccionó rompiendo relaciones con los andaluces. El choque diplomático acabó en tablas. En el campo, el Barça salió con furia y con “Correcaminos” Balde causando estragos por la izquierda. Lamine Yamal estuvo impreciso en los primeros minutos pero su peligro se atisba hasta cuando falla. Los culés dominaban pero en el minuto 15 Rakitic soltó un latigazo ante el que se tuvo que emplear a fondo su ex compañero Ter Stegen. No quería Mendilibar vivir un asedio permanente en su área y pedía a sus jugadores salir de la cueva.
Cinco minutos después una jugada espectacular de João Cancelo con pase de fantasía para su tocayo Félix acabó con un remate del delantero al larguero de la portería de Nyland. Le ha cambiado el aire completamente Cancelo a la banda derecha azulgrana. Ocampos y Lukebakio creaban peligro arriba y eran difíciles de sujetar para los defensores culés. El Barça buscaba los espacios para aprovechar la velocidad de Balde, Lamine Yamal y la llegada de Lewandowski. Raphinha, que estaba jugando por el centro, se rompió cerca del descanso y tuvo que dejar su lugar en el campo al joven Fermín.
Los andaluces salieron con una marcha más en la segunda mitad pero el Barça asustó con dos ocasiones seguidas. Una de Lewandowski que despejó el portero noruego Nyland y un cabezazo de Gavi tras saque de esquina que se marchó fuera.
La vida a veces tiene paradojas increíbles y en Montjuïc se vio una de ellas. Sergio Ramos, madridista de pro, se metió un gol en propia meta en una acción sin aparente peligro. Un centro de Ferrán Torres a Lamine Yamal fue cabeceado hacia atrás por el adolescente, el balón tropezó en Ramos y el camero fue el primero en batir a su propio portero.
El partido tuvo poca historia a partir de ese momento. El Sevilla, enrabietado, buscó el empate a la desesperada pero los de Xavi se defendieron con orden. El azar quiso que el triunfo del Barcelona y la recuperación del liderato fuese gracias a un icono madridista como Sergio Ramos.
Jugador Flashscore: Fermín López