La Unión Deportiva Las Palmas ha sido uno de los peores equipos de la segunda vuelta, especialmente desde mediados de febrero, cuando empezó una fatídica racha de resultados. El objetivo estaba casi asegurado e incluso se barruntaba la posibilidad de luchar por posiciones europeas, pero las ocho derrotas consecutivas y las 14 jornadas seguidas sin ganar han sido un auténtico lastre para el conjunto de García Pimienta, que no seguirá.

"De la actual plantilla hay jugadores que estaban cedidos y volverán a sus equipos, hay jugadores que finalizan contrato y habrá novedades con algunos chicos con contrato en vigor. El equipo sufrirá 10 o 12 bajas. Hemos decidido que Campaña siga en la entidad y también Marvin va a firmar por las próximas cuatro temporadas", explicó Ramírez, consciente de la involución sufrida en los últimos meses. "Hemos hecho autocrítica", insistió. 

Sobre Álvaro Valles, que debutaba en la élite en este curso, apuntó lo siguiente: "Lo pudimos vender en enero y no lo hicimos porque pusimos en valor que lo importante era el equipo. Le queda una temporada, la UD lo ha querido renovar y su representante no ha querido. Si no se da, tendremos que buscar una alternativa. A día de hoy no hay ninguna oferta. Es cierto que el mercado es largo. Si llega alguna oferta trataremos, evidentemente, que beneficie a Las Palmas y al chico".

Ramírez, quien cree que el límite salarial volverá a ser de 35 millones de euros, se refirió a una posición clave: "No nos podemos empecinar. En diciembre tuvimos la posibilidad de traer a un grandísimo delantero, pero prefirió quedarse en su equipo. Vamos a ver qué es lo que pasa con el nuevo entrenador. Viene a adaptarse a nuestro sistema, aunque quizá sea un poco más vertical y necesite otro tipo de delantero".