Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más
Publicidad

El Atleti exhibe pegada ante un combativo Valladolid y continúa su caza al Madrid (2-5)

David Alonso
Una pésima salida de Masip permitió a Giménez marcar el 0-2
Una pésima salida de Masip permitió a Giménez marcar el 0-2@Atleti
El fútbol es un espectáculo de masas por partidos como el del José Zorrila. Con una eficacia inusual, el Atleti se puso 0-3 y para el Valladolid parecía todo perdido, pero un penalti marcado por Larin antes del descanso dejó un resquicio a la esperanza. Los del Cholo pudieron sentenciar pero un golazo, con algo de fortuna, de Escudero resucitó a los locales que se lanzaron a tumba abierta a por un Atleti desconcertado. Pudo llegar el empate pero el infortunio de Joaquín, con un gol en propia meta, sentenció un duelo espectacular al que Memphis puso una firma de lujo.

A falta de otros alicientes más ambiciosos, el Atleti se motiva con darle caza a su eterno rival en la pelea por el subcampeonato de LaLiga. En otras circunstancias y con otro rival sería un objetivo menor, pero ahora se ha convertido en un acicate para no dejarse llevar en la recta final del campeonato. El Valladolid no necesitaba buscar desafíos tan forzados. La batalla por la permanencia ya es, de por sí, un reto de primer nivel. Así lo entendió Pucela, que ofrecía un ambiente de gala para recibir a los colchoneros. 

El Valladolid salió con ganas pero el primer gol lo cocieron y sirvieron dos defensas del Atleti. Un pase largo y medido de Giménez encontró el desmarque de Nahuel Molina por la banda derecha. El lateral argentino se plantó ante Masip y remató cruzado de forma magnífica para poner por delante a su equipo. Era el segundo gol en LaLiga del campeón del mundo tras el que le marcó al Rayo en Vallecas. 

Molina marcó su segundo gol en LaLiga
Molina marcó su segundo gol en LaLiga@Atleti

Giménez estaba on fire. Cuatro minutos después su magistral pase a Molina, cazó de cabeza un saque de falta botado por Griezmann y aprovechó que Masip salió a por uvas para hacer el segundo. Simeone disfrutaba desde el banquillo con la eficacia de su equipo y Pezzolano se lamentaba de lo vulnerable que era su defensa. El tercero no llegó en el 28 de milagro. Morata picó de exterior ante la salida de Masip y Hongla salvó sobre la línea. El Valladolid estaba groggy y al borde del KO. Lo terminó de tumbar en la lona Morata tras asistencia de Griezmann. 

La misión para los blanquivioletas era ya casi imposible pero por ponerle una pizca de emoción a la película en la segunda parte el canadiense Larin marcó de penalti tras golpear Hermoso a Gonzalo Plata dentro del área. A pesar de ello, los colchoneros se fueron al vestuario con la sonrisa en la cara. Pocas veces han demostrado una eficacia semejante. 

Estadísticas del Valladolid - Atlético de Madrid
Estadísticas del Valladolid - Atlético de MadridOpta by Stats Perform

Griezmann era el centro de todo. El ritmo del partido, como casi siempre, lo marcaba él. Todo pasaba por sus botas. Aceleraba, pausaba y movía a su antojo al equipo. En el 56 estuvo cerca de rematar su gran faena marcando un golazo de volea a pase de Molina pero el remate era de extrema dificultad. 

El Valladolid se resistía a morir sin luchar. En el 62 el central Joaquín envió a la cruceta izquierda de la portería de Gbric un saque de esquina de Escudero, el rechace la cayó a Hongla, que marcó, pero estaba en fuera de juego. El Atleti menos cholista no se encerró. Siguió buscando el gol y Correa lo tuvo cerca en el 69 con un remate desde fuera del área al palo. 

Griezmann volvió a realizar un magnífico partido
Griezmann volvió a realizar un magnífico partido@LaLiga

El fútbol es una caja de sorpresas. Un remate de Escudero con la coronilla al saque de un córner botado por Monchu cogió una parábola imposible de detener para Grbic. Pucela enloqueció. El propio Escudero, dos minutos más tarde, puso un centro preciso para que Sergio León rematase. El balón se fue al larguero. El equipo de Ronaldo, que estaba en la lona, se levantó con vigor y empezó a dominar la pelea. El Atleti, muy superior durante gran parte del choque, se veía desbordado en ocasiones. 

Pucela hervía pero el fuego lo apagó uno de los suyos. En un centro de Correa sin destinatario claro, Joaquín Fernández, que pudo marcar en la portería rival lo hizo en la propia. Ahí terminó la ilusión de los blanquivioletas tras un gigantesco esfuerzo en un partido de los que hacen grande al fútbol. Depay, en una jugada descomunal, le puso rúbrica y sello a un recital colchonero en ataque. 

Jugador Flashscore del partido: Giménez

Aquí puedes ver todos los detalles del Valladolid - Atlético de Madrid