Real Madrid y Rayo Vallecano hacen campaña con un duelo muy entretenido (2-1)
Sin nada en juego más allá del honor en el derbi madrileño, Rayo Vallecano y Real Madrid decidieron hacer campaña de cara a tener contentos a sus adeptos para la temporada que viene. Lo agradecieron los que acudieron al Santiago Bernabéu en una lluviosa y poco apacible tarde intersemanal que nada invitaba a sentarse en la grada.
A pocos días de las elecciones municipales del 28 de mayo en la capital de España, ambos equipos tomaron ejemplo y echaron el resto sobre el césped del mismo modo que los partidos políticos lo hacen en los últimos coletazos de sus carreras por obtener votos que les permitan gobernar.
En este caso, los de Iraola y los Ancelotti pugnaban por el beneplácito de sus fieles, a quienes han dado algunas alegrías este curso, pero les han dejado con un sabor amargo en el tramo final con sus respectivos desempeños. En el sur de Madrid llegaron a soñar con Europa y se quedaron en el camino, mientras que en el norte vieron cómo se cerraban las puertas de la final de la Liga de Campeones de forma muy abrupta.
Dada la tesitura, blancos y franjirrojos se tomaron a pecho lo de darle importancia a las citas postreras de la temporada. Así, al menos lograrían retener a los que creyeron en ellos y se desencantaron por los desengaños sufridos.
Las hostilidades se sucedían como en un debate en el que dos facciones de ideologías opuestas buscan dañar a su oponente para ganarle terreno. Iraola se mostraba muy contento con las numerosas jugadas que finalizaban con disparos al arco defendido por Thibaut Courtois. Los locales, por su parte, llegaban menos, pero con más peligro.
Superada la media hora de choque, el líder de la formación blanca, Karim Benzema, tiró de galones para cargarse la responsabilidad a la espalda y anotar el 1-0. El francés, medio cojo, recibió un pase magistral de Valverde y, lejos de ponerse nervioso, sentó al meta rayista con un recorte y definió a puerta vacía.
No bajó los brazos el Rayo, consciente de que un giro de última hora podría volver a equilibrar la balanza. Así sucedió, un madridista trasladado a la oposición por falta de sitio en primera fila, Raúl de Tomás, marcó el 1-1 con un potente golpeo raso. Sin embargo, Rodrygo les borró la sonrisa de un plumazo con un golazo que celebró levantando el puño al cielo.
Vini emperador
Con el clima preelectoral suspendido sobre el templo merengue, todo lo que sucedía tenía tintes muy políticos. En un movimiento muy del imperio romano, el Bernabéu aprovechó el minuto 20 para apoyar a un Vini Jr. que se encontraba en el palco presidencial junto a Florentino Pérez. Una clara muestra de que el club le respalda ante los racistas y descerebrados.
El brasileño devolvió el gesto a la grada levantándose para saludar cual emperador en su coliseo. Intocable, orgulloso y seguro de que doblegará a todos aquellos que intentan acabar con él para arrebatarle su trono.
Se encontraba muy presente toda la polémica relacionada con el futbolista carioca, pero el fútbol consiguió ganar protagonismo. Es lo que se busca conseguir, silenciar a los racistas y dejar al deporte que hable. La mejor forma de empezar fue con un magnífico encuentro entre dos escuadras que hoy suben enteros en las encuestas después de su actuación.
Jugador Flashscore del partido: Rodrygo.
Consulta todos los detalles del Real Madrid - Rayo Vallecano pinchando aquí.