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Autopista hacia el infierno: siete candidatos, cinco se salvarán y dos caerán al abismo

David Alonso
El Espanyol es el que peor lo tiene para salvarse de los siete equipos en peligro.
El Espanyol es el que peor lo tiene para salvarse de los siete equipos en peligro.AFP
El próximo domingo a las 19:00 podría sonar el mítico tema "Highway to hell" ("Autopista hacia el infierno") de AC/DC en varios campos de Primera División en los que siete equipos dispararán la penúltima bala de su cargador para seguir con vida en LaLiga. Celta y Valencia tienen cierta ventaja (40 puntos ambos), el Almería va más justo (39), Getafe, Cádiz y Valladolid, con 38 cada uno, están en zona muy crítica y el Espanyol, con 35, es el que peor lo tiene con bastante diferencia. Con varios duelos directos entre los siete, las dos últimas jornadas serán de infarto en muchos campos y para muchas aficiones. Analizamos las probabilidades de cada uno de ellos.

Espanyol: 35 puntos. Parece casi imposible que se salve si no gana los dos partidos que le quedan, y aún así tampoco sería seguro ni mucho menos. Ha comprado muchas papeletas para llevarse el disgusto y su situación es la más complicada de los candidatables al descenso. El épico empate ante el Atlético tras ir perdiendo por 0-3 les da un hilo de esperanza a expensas de lo que ocurra con la impugnación del partido por el "gol fantasma" de Griezmann. Los dos choques que le quedan son contra rivales directos: visitará al Valencia y recibirá al Almería. Deben rezar porque les hará falta. 

Valladolid: 38 puntos. La victoria contra el Barça les devolvió a la vida cuando el ataúd estaba preparado. Los de Pezzolano llegaban al duelo contra el relajado campeón con un pésimo bagaje de 5 derrotas seguidas. No lo tienen fácil pero dependen de sí mismos. También se enfrentarán a dos adversarios que luchan por el mismo objetivo: la supervivencia. Viajarán a Almería y recibirán en Pucela, la última jornada, al Getafe, en lo que se presume será un duelo dramático, un auténtico desafío en O.K. Corral.

Cádiz: 38 puntos. Perdió en Villarreal, algo que entraba dentro de los cálculos, pero ganar al Valladolid supuso un salvavidas para los andaluces. Lleva una victoria y tres dertotas en los últimos cuatro partidos. Recibirá al Celta en el Nuevo Mirandilla y acabará en el campo del descendido Elche, partido trampa porque los ilicitanos ya han ganado al Rayo (4-0) y al Atleti (1-0) teniendo ya el pasaporte para Segunda en la mano. 

Getafe: 38 puntos. El gol de Alderete en el Villamarín supo a gloria bendita para Bordalás, Ángel Torres y todo el universo azulón. Aún así, siguen con el agua por el cuello. El domingo llegará al Coliseo Osasuna, que ganó al Athletic de Bilbao y quiere el séptimo puesto para jugar la Conference League. Echará el cierre a la temporada  con el que puede ser el partido del año para ellos: la visita a Pucela. La baja de Enes Unal, su jugador más desequilibrante, supone un duro golpe en sus aspiraciones de permanencia. 

Almería: 39 puntos. Lleva dos derrotas en los tres últimos partidos (Real Sociedad y Osasuna), que le dejan a los pies de los  caballos. Tiene una ligera ventaja sobre los cuatro que están más abajo en la clasificación pero se lo jugará todo en dos encuentros a vida o muerte deportiva. Recibirá al Valladolid y acabará visitrando Cornellá. Serán dos choques de alta tensión. 

Celta: 40 puntos. La alarma lleva tiempo sonando en Vigo. Contaba con los tres puntos frente al Girona y al final tuvo que dar gracias por conseguir uno gracias al paradón de Iván Villar al joven Joel Roca en el último minuto. Les toca sufrir mucho. Llevan una victoria en los últimos diez partidos y Aspas está mermado físicamente. Alerta máxima en Vigo. El domingo juegan en Cádiz y terminarán en casa frente al Barça, algo que, visto lo que ha ocurrido con los culés en los dos últimos partidos, parece una buena noticia. 

Valencia: 40 puntos. En Mestalla se temían lo peor y algunos ya se preparaban para el duelo pero dos triunfos seguidos, ante Celta y Real Madrid, les devolvió el aliento. La derrota en Mallorca rompió una buena dinámica y tendrá que pelear hasta el último segundo. Recibirán al Espanyol, que necesita ganar imperiosamente, y concluirán el campeonato en casa del Betis. Tiene ventaja pero si se descuida se puede llevar un varapalo muy severo.