"Quiero darle las gracias a ustedes por el cariño que siempre me han tenido. Ha sido algo muy lindo que voy a recordar por siempre", dijo un emocionado Esteban Paredes, que anotó 221 goles en el campeonato chileno, marca histórica de la competición.
El evento de despedida, con una asistencia de más de 40.000 personas, comenzó con un encuentro entre el "Team Paredes" y los "Amigos de Paredes", y luego un amistoso que enfrentó a Colo Colo con Colón de Santa Fe de Argentina.
Fue en Colo Colo donde el artillero cosechó sus mayores éxitos. Allí jugó entre 2009 y 2012 y luego desde el 2013 al 2020, ganando ocho títulos, entre ellos cuatro ligas, siendo además el tercer máximo goleador histórico del club "albo" con 198 tantos.
Entre sus invitados hubo varios excompañeros del goleador, como el paraguayo Justo Villar, el argentino Ezequiel Miralles y los chilenos Jorge Valdivia y Pablo Contreras.
"Paredes es parte de la historia Colo Colo, es uno de los grandes de su historia", dijo Valdivia tras el partido de despedida, donde dio una asistencia a Paredes.
También se presentaron en la cita Arturo Vidal y Gary Medel, pero no pudieron disputar ningún minuto debido a su compromiso con la selección chilena, que se enfrentará en un amistoso a Paraguay el lunes.
"El de los goles"
Apodado por los hinchas "albos" como "El de los goles", debutó en Santiago Morning en 2000 y también jugó en otros equipos chilenos como Universidad de Concepción, Cobreloa, Coquimbo Unido, y en México, defendiendo a Pachuca, Atlante y Querétaro.
Paredes rompió el récord de goles anotados en el fútbol chileno durante su paso en Colo Colo ante su máximo rival, la Universidad de Chile. En la novena fecha del campeonato local de 2019, anotó el segundo gol del encuentro en el Estadio Monumental.
También destacó en la Copa Libertadores, siendo el máximo goleador chileno de la competición. En 42 partidos anotó 23 goles, misma cifra que un histórico delantero como el argentino Martín Palermo.
En su homenaje final, Esteban Paredes empezó a entregar el brazalete de capitán a los jugadores de todas las divisiones menores del club, que dio paso a una última ovación de su público.