Raphael Varane (31) ha sorprendido a todos anunciando que deja el fútbol pocos meses después de haber fichado por el Como italiano en calidad de agente libre, después de finalizar su etapa en el Manchester United.
Desafortunadamente, el calvario que han supuesto las lesiones para el francés en los últimos tiempos han forzado un adiós prematuro. De hecho, sólo jugó 23 minutos oficiales con su nuevo equipo, ya que se lesionó el 11 de agosto contra la Sampdoria en la Copa de Italia.
Tras ser recomendado por el mismísimo Zinedine Zidane al Real Madrid, el galo aterrizó en la Casa Blanca con 19 años. Su impacto fue enorme y sus actuaciones ante la mejor versión de Messi en las competiciones españolas resultaron ser su pico de forma. Sin embargo, la rodilla comenzó a jugarle malas pasadas demasiado pronto y nunca volvió a ser el de sus días más brillantes.
Como merengue, marcó 17 goles y, en 10 temporadas, ganó 4 Champions League, 4 Mundiales de Clubes, 3 Supercopas de Europa, 3 Ligas, 1 Copa del Rey y 3 Supercopas de España. Fue parte importante del mejor ciclo triunfal de la historia del club de Chamartín.
Con la elegancia de la que siempre hizo gala, sin hacer ruido y despidiéndose emotivamente de sus compañeros, Varane abandonó la capital de España para enrolarse en las filas de un Manchester United que ya era la casa en ruinas que es hoy en día. Aún así, con los Red Devils consiguió levantar una Copa de la Liga Inglesa en 2023, y una FA Cup en 2024, en Wembley, en el que fue su último encuentro como mancuniano.
Vistiendo la camiseta de la selección francesa alcanzó la cima que todo futbolista anhela. Fue campeón del mundo en 2018 y gozó de una importancia capital para Les Bleus con siete apariciones y un gol. En Catar 2022, donde tuvo seis presencias, se quedó a las puertas del bicampeonato tras perder con Argentina, por penaltis, en la final.
Comunicado de Raphael Varane
"Dicen que todas las cosas buenas deben llegar a su fin.
En mi carrera he asumido muchos desafíos, me he levantado ocasión tras ocasión, se suponía que casi todo era imposible. Emociones increíbles, momentos especiales y recuerdos que durarán toda la vida. Reflexionando sobre estos momentos, es con inmenso orgullo y sensación de realización que anuncio mi retiro del juego que a todos nos gusta.
Me mantengo en el más alto estándar, quiero salir fuerte, no solo aferrarme al juego. Se necesita una gran dosis de coraje para escuchar a tu corazón y a tu instinto. El deseo y las necesidades son dos cosas diferentes. Me he caído y me he levantado mil veces, y esta vez, es el momento de parar y colgar mis botas con mi último partido ganando un trofeo en Wembley.
Me ha encantado luchar por mí mismo, mis clubes, mi país, mis compañeros de equipo y los seguidores de cada equipo en el que he jugado. De Lens a Madrid a Manchester, y jugando para nuestra selección. He defendido cada escudo con todo lo que tengo, y he amado cada minuto del viaje. El juego al más alto nivel es una experiencia emocionante. Prueba cada nivel de tu cuerpo y tu mente. Las emociones que experimentamos no las puedes encontrar en ningún otro lugar. Como atletas, nunca estamos satisfechos, nunca aceptando el éxito. Es nuestra naturaleza y lo que nos alimenta.
No me arrepiento, no cambiaría nada. He ganado más de lo que podría haber soñado, pero más allá de los elogios y trofeos, estoy orgulloso de que pase lo que pase, me he aferrado a mis principios de ser sincero y he intentado irme por todas partes mejor de lo que lo encontré. Espero haberlos hecho sentir orgullosos.
Y así, una nueva vida comienza desde el campo. Me quedaré con el Como. Simplemente, sin usar mis botas y espinilleras. Algo sobre lo que estoy deseando compartir más pronto.
Por ahora, a los seguidores de cada club en el que jugué, a mis compañeros de equipo, entrenadores y personal... desde el fondo de mi corazón, gracias por hacer este viaje más especial de lo que mis sueños más salvajes jamás podrían prever.
Gracias, fútbol.
Con amor, Rapha".