"El máximo será de 25.000 agentes del orden en Ile de France y Châteauroux", donde tendrán lugar las pruebas de tiro, declaró el ministro en rueda de prensa.
"Contaremos con el apoyo de las tres fuerzas de intervención" (BRI, Raid, GIGN) con 300 efectivos y "10.000 agentes de seguridad privados", aseguró Darmanin, quien señaló que no se había producido una "amenaza clara" contra estos Juegos.
La seguridad de las delegaciones 'sensibles', como la de Israel, "será asumida de la misma manera que en los Juegos Olímpicos", afirmó Darmanin, que detalló que Israel tendrá 27 atletas, dos árbitros y el presidente del comité paralímpico, quienes serán "protegidos permanentemente".
Tony Estanguet, presidente del comité organizador de los Juegos de París, celebró la decisión de mantener "el nivel de movilización para garantizar la seguridad del relevo de la llama de los Juegos Paralímpicos".
La ceremonia de apertura de los Paralímpicos tendrá lugar el 28 de agosto en la plaza de la Concordia y será dirigida también por Thomas Jolly (como la apertura y clausura de los Juegos Olímpicos). El sueco Alexander Ekman será el encargado de la coreografía de los 150 bailarines de los que una veintena serán personas con discapacidad.
Estos Juegos Paralímpicos coincidirán con la vuelta en septiembre tanto de los colegios como de la vida política, que está pendiente de la formación de un nuevo gobierno.
En París, los transportes en general, y en particular el metro - antiguo y poco accesible -, representan un punto negro en el recibimiento a las personas con discapacidad, aunque la ministra de Deportes saliente, Amélie Oudéa-Castera, aseguró que "más de 65 estaciones son accesibles".