Ousmane Dembélé (25) es, desde hace tiempo, uno de los grandes amores futbolísticos de Xavi Hernández. No se esconde el entrenador cuando le preguntan por el extremo, incluso cuando parecía estar más fuera que dentro por rechazar la propuesta de renovación de una directiva muy descontenta por sus desplantes. Se llegó al 30 de junio y no rubricó su firma, pero días después, ya en julio, llegó a un acuerdo con el Barcelona, tal y como demandaba el técnico catalán.
No hay que viajar mucho en el tiempo, a este mismo viernes, para conocer la valoración que hace sobre uno de sus futbolistas favoritos: "Es un jugador referencial, diferencial. Cuesta encontrar a estos jugadores tan determinantes en el uno contra uno. Está a un nivel extraordinario. Espero que siga muchos años en el club. Tratamos de que no se lesione nunca con un trabajo exhaustivo a todos los niveles, pero las lesiones pasan y pasarán. Él ha cambiado el chip, se siente querido y está donde quiere estar. Estoy encantado".
Pese a su extenso historial médico, ha podido contar con él en prácticamente todos los partidos. No estuvo disponible en su debut como entrenador, contra el Espanyol en LaLiga, pero desde entonces ha olvidado las lesiones y ha sido una pieza más que habitual en las alineaciones, sobre todo en el presente curso. Sus número hablan por sí solos: ha disputado 28 partidos, ha marcado ocho goles y ha repartido siete asistencias. Su rendimiento, al contrario que en la final del Mundial de Catar, sobresaliente.
Duro calendario por delante
Se acababa de superar el minuto 20 cuando Dembélé encaró a Arnau Martínez por el costado izquierdo. El jugador del Girona ganó el duelo y recuperó la posesión del balón, pero todo tenía una clarísima explicación: el ex del Borussia Dortmund había tenido que interrumpir su progresión. En ese mismo instante, una vez notó la dolencia en el cuádriceps izquierdo, sensación casi olvidada ya después de más de un año sin contratiempo alguno, Xavi llamó a Pedri González para que se quitase el chándal.
El internacional con Francia será sometido a pruebas médicas para determinar el alcance de una lesión que provoca sudores fríos en el cuerpo técnico. Lo único seguro es que se trata de un problema muscular, pero son muchos los escenarios abiertos (desde parar apenas unos días hasta tener que estar al margen durante varios meses). Y lo que le viene al cuadro culé no es poca cosa: Betis, Villarreal, Sevilla y la doble eliminatoria contra el Manchester United. Los interrogantes se resolverán una vez se conozcan los resultados.
100 partidos con 20 años
La entrada de Pedri, quien probablemente hubiese salido al terreno de juego en la segunda mitad, sobre todo en caso de marcador apretado, tiene premio individual para el joven centrocampista, que volvió a ver portería. Pese a sus 20 años, el ex de Las Palmas ya es centenario como culé. Su prematuro fichaje por el club de la Ciudad Condal y el importante rol que ha tenido desde el principio, los principales factores que explican este destacado logro, uno más para un futbolista llamado a hacer carrera en el Camp Nou.
Los registros del extremo son fantásticos, pero la relevancia del mediocentro va más allá de los números. Sin embargo, ha superado ya las tres dianas que marcó en el anterior curso liguero (lleva cinco y otra más que anotó recientemente en la Supercopa de España). Lo más curisoso es que aún no ha dado ninguna asistencia pese a haber jugado ya más de 30 partidos (incluyendo los compromisos con la selección).