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Llull y Musa dinamitan el Clásico y dejan al Barça sin el liderato en la Euroliga

Denis García
Llull fue el principal artífice de la remontada blanca.
Llull fue el principal artífice de la remontada blanca.AFP
En un emocionante partido que se decidió en la prórroga, el Real Madrid se vengó de la derrota del Clásico del pasado 2 de enero y se impuso al Barcelona por 91–86 gracias a una gran remontada de la mano de Llull y al acierto de Musa en el tiempo extra. Con esta victoria, los madrileños siguen al frente de la Euroliga, mientras que los catalanes quedan a un triunfo de sus máximos rivales.

Como si se tratara de una continuación del desastroso partido que los blancos hicieron en El Pireo en la anterior jornada de la Euroliga, el inicio ante el Barça fue más que negativo para sus intereses.

Con una sola canasta del Madrid en los cuatro primeros minutos, los culés tiraron de fórmula checa Vesely-Satoranski para ponerse pronto por delante en el marcador, una ventaja que conservarían hasta mediado el último cuarto.

El Barça dominó desde el inicio

Los chicos de Chus Mateo estaban muy atascados en ataque y solo Tavares, que metió los seis primeros puntos de los suyos, hizo frente al ciclón azulgrana, que rápidamente se puso con un 18-6 a su favor gracias a su mayor fluidez ofensiva, que les dejó varios tiros abiertos y entradas a canasta con poca oposición.

No se entonó el Madrid hasta un triple de Musa a falta de dos minutos para el término del primer cuarto, que acabó con 20-16 para los catalanes. Aunque el bloqueo blanco en ataque continuó en el segundo periodo, acentuado con dos triples de Abrines.

La mala primera mitad de los de la capital quedó plasmada en el hecho de que, hasta un triple de Rudy a poco para el descanso, solo Tavares, Deck y Musa habían anotado, todo lo contrario que en el cuadro visitante, como muchas más armas ofensivas que les hizo llegar a la pausa con un 32-39 a su favor con dos triples finales de Satoranski y Laprovittola.

El Real Madrid pareció espabilar tras volver de vestuarios. Yabusele y el Chacho Rodríguez les acercaron a dos puntos (42-44) pero, una vez más, dos tiros de tres, en esta ocasión de Kalinic, volvieron a dejar a los de Jasikevicius con una buena ventaja (50-59).

El huracán Llull forzó la prórroga y Musa ejecutó

Y así se llegó al territorio Llull. El veterano base, que había pasado desapercibido hasta entonces, se echó al equipo a la espalda y dio rienda suelta a su “locura”. De repente, se volvió imparable y, con 15 puntos en el último cuarto, puso a los suyos por delante por primera vez en el choque a tres minutos del final.

Pero también apareció Higgins. Aunque tampoco se le había visto, demostró su sangre fría con cinco puntos en los últimos dos minutos, pero a 40 segundos del final falló el tiro que habría puesto al Barcelona con un casi definitivo +4. Llull anotó dos tiros libres para empatar y tanto él como Mirotic hicieron pasos en sus últimas posesiones, así que el WiZink Center pudo disfrutar de cinco minutos extra de Clásico.

En la prórroga, con toda la inercia a su favor tras haber remontado previamente, los merengues se multiplicaron en defensa y, con un gran Musa que metió nueve puntos en el tiempo suplementario, impusieron su calidad para hacer inútil el intento culé de sobreponerse al palo que les había supuesto el empate y finiquitar un partidazo digno de dos de los mejores equipos de Europa.

Mirotic fue el máximo anotador de los barcelonistas con 17 puntos, aunque enfrente tuvo los 18 de Musa, los 19 con los que se quedó Llull finalmente y los 23 de Deck, que sirvieron para que el Madrid siga al frente de la clasificación de la Euroliga con un balance de 14-7, una victoria por encima del Barça.