Dressel y Ledecky encabezan los desafiantes trials de natación de EEUU. Ambos llegan con credenciales formidables a la exigente competencia de nueve días, a disputarse a partir del sábado en Indianápolis, donde solamente un puesto entre los dos mejores puede asegurar un billete a París.

El Lucas Oil Stadium, la casa de los Indianapolis Colts de la NFL, será el escenario de una espectacular competencia entre los nadadores estadounidenses que aspiran a cumplir el sueño olímpico y donde cualquier desliz puede significar decir adiós a la cita que inicia el 26 de julio en París.

Dressel, de 27 años, ha tenido un camino con momentos de máximo rendimiento y algunos tropiezos. Logró dos medallas de oro en relevo en los Juegos Olímpicos de Río en el 2016 y en 2021 en Tokio sumó cinco medallas de oro convirtiéndose para muchos en el heredero del legendario Michael Phelps.

Pero la gloria dio paso a la incertidumbre cuando se retiró del Campeonato del Mundo en 2022 para mantenerse nueve meses fuera de la actividad competitiva. De vuelta a la acción, Dressel está listo para competir en los 100 metros libres, 100 metros mariposa y 50 metros libres.

Pese a que no llega con la mejor marca en ninguna de estas carreras, su progreso indica que está listo para competir con los más jóvenes. El medallista de bronce Dare Rose en los 100 metros mariposa y Jack Ales, plata en los 50 metros libre, son algunos de sus máximos oponentes.

Cuando su carrera retomó impulso este año, el nadador dijo que su parón había servido para renovar su relación con el deporte.

"Sabía que estaba en una situación que no era saludable", dijo Dressel. "Llegué a un punto en el que pensé que si no rompía un récord mundial en cualquier evento, mi carrera era un desperdicio".

"Ese era mi pensamiento, era bastante ridículo. Porque sé que soy un buen nadador, pero si me preguntabas hace un par de años, no sé qué diría".

Ledecky busca extender su reinado

Ledecky, que irrumpió en la escena internacional a los 15 años con una victoria en los 800 metros libres en los Juegos Olímpicos de Londres en el 2012, pretende competir en París 2024 en los 200, 400, 800 y 1.500 metros libres en busca de sumar más gloria a sus siete medallas de oro olímpicas.

Katie Grimes, quien ya aseguró un cupo en París en natación de aguas abiertas, tratará de ganarse un puesto en los 800 y 1.500 metros libres, los 400 metros estilos y posiblemente los 400 metros libres.

Mientras que Kate Douglas, quien se llevó el bronce en los 200 metros en su debut en Juegos Olímpicos en Tokio, llega a las pruebas como la mejor estadounidense en los 50 y 100 metros libres, los 200 metros braza y los 200 metros estilos.

Los 100 metros femeninos prometen muchas emociones con la atleta olímpica en Tokio, Torri Huske, quien retó el récord mundial de Sarah Sjostrom en abril, enfrentándose a Gretchen Walsh y a la medallista de plata, Claire Curzan.

Regan Smith encabeza los 100 y 200 metros espalda femeninos y los 200 metros mariposa, intentando renovar rivalidades con la australiana Kaylee McKeown y la canadiense Summer McIntosh.

Por su parte, Ryan Murphy, quien completó el doblete olímpico en Río, pero se tuvo que conformar con plata y bronce en Tokio, encabeza los 100 y 200 metros espalda.

Las miradas también estarán en lo que haga Carson Foster, favorita en los 200 y 400 metros estilos, que tiene como objetivo rivalizar en París con la sensación local, Leon Marchand.