Pepe Reina ya piensa en su retirada: "Poder acabar aquí ha sido un final soñado"
Es un tipo feliz Pepe Reina. Criado en la cantera del Barcelona junto a Víctor Valdés, perdió la pelea por la titularidad y tuvo que emigrar para disfrutar de su profesión. Fue en el Villarreal, desde 2002 hasta 2005, donde terminó de madurar y dio el salto al Liverpool y a una carrera internacional que le llevó a ser campeón del mundo.
Ahora, tras jugar en Alemania (Bayern), volver a Inglaterra (Aston Villa) e Italia (Nápoles, Milán y Lazio), pudo regresar a donde siempre había querido. "Poder acabar aquí, donde me hice realmente futbolista, es un sueño hecho realidad. Todos los años desde que me fui pensaba cuándo sería el momento y ha sido el ideal. Acabar mis días como futbolista, quién sabe si para empezar como entrenador, es la opción soñada", ha reconocido.
Puede ser esa su nueva ambición, la de dirigir desde el banquillo. "Me tengo que preparar, pero la ilusión es poder empezar aquí, dependerá del club". Aunque conociéndole, todos apostarían a que, en caso de ser entrenador, acabaría más tarde o más temprano, en el primer equipo del Villarreal.
"Ojalá. Para mí sería otro sueño cumplido". Como lo fue ver a sus hijos actuar de recogepelotas en el duelo que jugó el Barcelona en La Cerámica. "Tienen un gran sentido de pertenencia con este club, juegan en las inferiores. Pero lo importante ahora es que se lo pasen bien, que adquieran los valores positivos de este deporte y que honren la camiseta del Villarreal".
Quién sabe. Lo mismo termina dirigiéndolos en la primera plantilla del submarino amarillo.