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Suspenden la audiencia de sobreseimiento de los rugbistas franceses en Argentina

AFP
Auradou asoma la cabeza.
Auradou asoma la cabeza.ANDRES LARROVERE / AFP
La citación, prevista para este viernes, fue postergada sin fecha definida, mientras se decide si se da lugar a una apelación solicitada por la denunciante, informaron el jueves fuentes judiciales.

El portavoz del poder Judicial de Mendoza, provincia donde los rugbistas fueron imputados por violación, confirmó a la AFP que ya no habrá el viernes la audiencia de sobreseimiento -es decir, el cierre del caso sin que llegue a juicio- y que "primero debe resolverse la apelación" presentada la semana pasada por los abogados querellantes.

El aplazamiento, el tercero en menos de un mes, es consecuencia de una apelación presentada por los abogados de la denunciante, que solicitan que se incorporen al expediente nuevas pruebas médicas y que se tengan en cuenta nuevas declaraciones periciales. Una cámara de apelaciones debe pronunciarse ahora sobre esta petición, según una fuente judicial.

Rafael Cúneo Libarona, abogado de los jugadores, declaró a la AFP que se trata de una "táctica absurda" y "dilatoria" por parte de los abogados de la demandante. No quiso dar una fecha aproximada para la audiencia de sobreseimiento, pero aseguró que "tendrá lugar, tarde o temprano".

Natacha Romano, abogada principal de la querella, no respondió el jueves a las consultas de la AFP.

Auradou y Jegou, de 21 años, están acusados desde hace casi cuatro meses de violación en grupo agravada, presuntamente cometida la noche del 6 al 7 de julio en un hotel de Mendoza, donde la selección francesa de rugby acababa de disputar un partido contra Argentina.

Desde el principio mantuvieron que las relaciones sexuales con la denunciante, una argentina de 39 años a la que conocieron en una discoteca, fueron consentidas y sin violencia. La querella, en cambio, denunció una violación con "violencia feroz".

Inicialmente en prisión preventiva y luego en arresto domiciliario en Mendoza, los jugadores fueron puestos en libertad a mediados de agosto y autorizados a regresar a Francia a principios de septiembre.